[Biografías sonoras]
Este proyecto fue tomando distintas formas (y hasta títulos).
En un primer momento estaba dividido en categorías de registro, donde no solo
había un interés por el sonido, pero con el suceder de los talleres optativos y
los cursos y el desarrollo del propio proceso estos márgenes se fueron acotando
y expandiendo en una sola dirección. Pero hay una intención que es subterránea,
que es el registro (¿futuros archivos?) y el proceso colaborativo. Es un
proyecto que intenta
recopilar y producir biografías sonoras y para ello invita a registrar los
sonidos que nos
rodean, nos acompañan y que producimos consciente o inconscientemente en
nuestra cotidaneidad.
Cada
espacio, cada cultura —pero también cada acto y cada instante—, están
vinculados inexorablemente a unos sonidos concretos que los caracterizan y los
identifican, o los individualizan, frente a las acústicas de otros espacios y
contextos (Juan-Gil López). En una cultura
de predominio visual, los sonidos quedan invisibilizados, como añadidura, más
todavía aquellos sonidos presumiblemente irrelevantes silenciados
durante largo tiempo en beneficio de aquellos otros ordenados que contenían una
información evidente y premeditada.
Comprendiendo
que cada lugar, como espacio habitado, con las cantidad de rasgos
que lo caracteriza y diferencia, no sólo se define por lo que produce, sino
también por lo que desecha, por el resultado residual de sus hábitos y de sus
actos, el sonido adquiere un papel de dato etnográfico, convirtiéndose
en una información cada vez más relevante la construcción de la identidad. El
registro y la fijación en un soporte artificial de los ruidos, palabras y
distintos sonidos de nuestro entorno nos permite conocer, aislar, fundar y
crear artificialmente un objeto-sonoro. De esta manera los hacemos palpables,
cognoscibles y volvemos a apropiarnos de nuestra propia audición, reflexionando
sobre los hábitos cotidianos de la escucha.
Concibo la
relación con el otro no desde el lugar del saber sino del de la duda y los
interrogantes, del intercambio y el diálogo (Carnevale Graciela, 2010), un otro
no como elemento de estudio sino como creador de discurso. A saber: cada biografía contiene 3 sonidos diferentes
registrados por sus propios autores (que después me los envían vía internet) yuxtapuestos
en forma de canon construyendo una narración
sonora biográfica. Los sonidos son manipulados lo menos posible para
respetar la identidad del mismo.
Por el
momento, proyecto dos instancias de materialización de la obra, una virtual y
otra material. En el formato virtual tendría una intención de cartografía sensible, donde cada
biografía sonora va a estar geolocalizada con una aplicación de googlemap, los
interesados en participar van a poder enviarme los sonidos vía internet, con
los datos geográficos desde donde fueron recogidos, todos estos datos van a
visualizarse en una plataforma que estoy aprendiendo a usar en el proyecto de
arte y tecnología. La apropiación de ese material mnemotécnico compartido en la
redes plantea preguntas acerca la actual construcción colectiva de
la memoria, en este aspecto internet se ha revelado como uno de
las herramientas y contexto idóneo para poner en marcha este tipo de procesos,
convirtiéndose en un «un sistema nervioso global, un cerebro en el que cada
internauta constituya una neurona y que acabará generando algún tipo de
inteligencia colectiva que produzca pensamientos e ideas por encima de las
capacidades de cada una de sus pequeñas partes» (Juan- Gil López).
Por otro
lado, en la versión material, a partir de las cualidades (reverberante,
abierto, atmosférico por ejemplo) de los sonidos recibidos y las biografías construidas estuve
estableciendo analogías formales en objetos de arcilla de aproximadamente 20 cm
de ancho por 20cm de alto. Estos objetos de arcilla son dispositivos de escucha
que se constituyen como un eslabón más en el diálogo con el otro y que podrían
materializar físicamente el proyecto en una instalación sonora.
Haciendo click debajo en la palabra sonido se puede acceder a lo realizado hasta el momento
No hay comentarios:
Publicar un comentario